Aldo F. Oliva es uno de los grandes secretos de la
poesía argentina. Nació en Rosario en 1927 y murió en la misma ciudad
en 2000. Maestro de maestros (Juan José Saer reconoció reiteradas veces
su influencia), Oliva publicó su primer libro a los 59 años: "Cesar en Dyrrachium". Luego siguieron "De fascinatione" (1997) y "Ese General
Belgrano" (2000). En todos, la combinación indisoluble de lo alto con
lo bajo, de los clásicos con los tangos cantados por Edmundo Rivero,
generan una poesía insólita y singular que comienza de a poco a
iluminar la producción de los nuevos poetas argentinos. Los poemas que
ofrecemos, analizados por Sergio Raimondi, pertenecen a "Una batalla.Poemas inéditos. Poemas últimos. 1978/2000" (Aldebarán Ediciones,
Rosario, 2002), de reciente aparición. Sergio Raimondi (Bahía Blanca,
1968) es, sin dudas, uno de los beneficiarios de las enseñanzas de
Oliva. Publicó "Catulito" (1999) y "Poesía Civil", un libro
programático de desafiante tono político e histórico, que se convirtió
en una de las propuestas poéticas más interesantes y atípicas
publicadas en 2000. Integra el equipo de la revista bahiense Vox. Arrodíllate, Fresno: serás ejecutado;
profusas, humildes ramínculas,
tajeadas cortecitas, apagada flor,
retorcido recato
vedan tu médula corrupta
y sabotea lo natural la justicia.
Ya lo cantaban los azahares desde el alba:
"muerte a quien no da vigor
al amo de la renta sometida.
Te enmascaras, Fresno, y simulas
tejerte en la bondad de las horas
que pasan; tienes astucia.
Pero la exhibición productiva
te arrasará, lo simple caducará".
¿Mienten, cantando, los azahares
desde el alba?
Entre la diversidad de cosas que podes hacer en Rosario, es escuchar poesía en los distintos bares... visita la agenda de la muni y enterate más : http://www.rosario.gov.ar/sitio/agenda/agenda.html
